11. Los medicamentos no se contraindican en lactancia para tener que suspender la lactancia para poder llevar a cabo un tratamiento antidepresivo ni tampoco el colecho es una indicación de la depresión, todo esto depende del contexto.
12. Muchas veces surgen recomendaciones de algunos profesionales que atienden con la lactancia materna, más por desconocimiento que por riesgo real del medicamento.
13. Es esperable que una mamá, en su primera semana de posparto, tenga cambios emocionales como la tristeza, conocida como tristeza puerperal, miedo, ansiedad y muchas otras emociones que surjan a raíz de las hormonas, pero es algo pasajero que puede estabilizarse como máximo hasta el primer mes de posparto.
14. La depresión posparto se diagnostica después del primer mes de posparto y tiene síntomas como tristeza, insomnio, inapetencia, inseguridad o miedo, y esto afecta el vínculo con el bebé. Es muy común que se presente en el primer trimestre del posparto, pero también puede aparecer después.
15. Si el sentimiento de tristeza, la sensación de vacío, una angustia constante frente a la maternidad, el insomnio, la inapetencia no disminuyen, es momento de levantar la mano y pedir ayuda.
16. La depresión no es solamente una enfermedad de las emociones, es una enfermedad de todo el cuerpo.
17. Una mamá con depresión no debe catalogarse como mala madre porque la depresión es una enfermedad, no una decisión.
18. La sexualidad se resignifica durante y después del embarazo. Por eso los senos pasan de ser un órgano que genera placer a ser un templo donde mi bebé se alimenta. Pero es importante la comunicación con la pareja para poder explorar esa sexualidad desde otro punto para descubrir otro mundo.
19. Una forma de disminuir la posibilidad de desarrollar una depresión durante el embarazo o en el postparto está fundamental en tener una red de apoyo sólido, que permita crear un ambiente seguro, además de imaginar y fantasear con el bebé para robustecer el vínculo.
20. El tiempo de un tratamiento de depresión posparto depende de una evaluación previa que debe tener la mamá porque cada caso es individual y requiere abordarlo de formas diferentes.
Debemos que el tema de la salud mental es muy importante y nunca es tarde para levantar la mano, no importa la etapa del embarazo o del postparto en la que te encuentres.
Nunca una ayuda está de más.