¿Existe la crianza desde la panza?

Gaudencio Rodríguez es Psicólogo y terapeuta mexicano, ha dedicado sus días a luchar por los buenos tratos en la infancia. Hoy conversamos con él sobre maltrato, buen trato y crianza respetuosa.
Write your awesome label here.
Luego de trabajar por más de una década y basado en su experiencia decide vivir bajo la consigna de Incidir en la prevención de la violencia, la cual tiene origen en el arranque de la vida, por eso es importante garantizamos la paz desde que el bebé es bebé, así la violencia que aqueja nuestra sociedad va a ser erradicada.

Como humanidad se nos va la vida intentando promover el buen trato entre las personas. Hoy en día existen muchos escenarios de enfrentamientos, ya sean ideológicos, culturales o fiscos, los cuales vienen precedidos por grandes lideres, los cuales Gaudencio denomina como los niños de antes y si nos ponemos a pensar en eso, es muy cierto, ya que cuando crecemos somos el reflejo de lo que alguna vez de niños soñamos. Ahora bien, entender la vida, resignificar la imagen de las personas está en función de la calidad de trato que recibimos cuando somos niños. Cuando alguien actúa de cierta manera, sea o no la correcta, esas acciones están ligadas a su pasado, puesto que algo debió haber vivido en su propia infancia para hoy no tener la capacidad empática de manera amplia, pero de ninguna manera son justificables.

El buen trato es la vacuna contra la violencia que vivimos día tras día. La percepción de violencia está dada incluso desde la preconcepción. Desde que estamos en la panza estamos criando una vida, pues criar significa cuidar, proteger y eso es lo que hacemos desde el día 0, porque además de ser seres biológicos, somos un compuesto de energía que requiere también un cuidado. Incluso el cuidado viene desde el momento de la preconcepción, desde la importancia de desear tener un hijo, desde ahí ya estamos siendo conscientes de una crianza.

Hoy en día existen aportes científicos sobre la crianza y tenemos dos opciones: o seguimos dichos lineamientos o nos dejamos llevar por el impulso, pero hay que tener en cuenta que ambos extremos pueden ser perjudiciales, lo ideal es definir una corriente basada en ambas posturas. Finalmente, el único modo efectivo de trascender en temas de crianza y cuidado es en la práctica. Gaudencio resalta la importancia de que todo ser humano practique el cuidado del otro en la sociedad, ya que dejamos la labor de cuidadores exclusivamente para mamás y papás, pero la labor del cuidador es necesaria para todo ser humano, de este modo vamos a ser más sensatos a la hora de decidir si queremos o no traer niños al mundo.  

El buen trato es la vacuna contra la violencia que vivimos día tras día.

En los nuevos modelos de crianza las familias han enfocado a una crianza individual, es decir, se limitan a lo que sucede bajo sus cuatro paredes, perdiendo el acceso al apoyo que incluso no solo la familia pude brindarles, sino la misma sociedad. Por este motivo estamos limitando también el incentivar el cuidado y la intención de los otros. Por otro lado, la comunicación con los bebés es muy importante, muchos pensamos que al ser bebés no van a poder entendernos, pero existen muchos factores que nos permiten poder comunicarnos con ellos, por eso hay que estar dispuestos a entenderlos y poder decirles que los entendemos y esto lo logramos a través de los diferentes actos que tenemos el día a día. Dicho esto, podemos también mencionar que mediante esa comunicación podemos ayudar a sanar heridas que se han abierto durante su gestación y su formación. Cuando hablamos de heridas nos referimos a momentos de dolor, de violencia, consciente o inconsciente, de malos tratos.

Ahora bien, el termino de buen trato en la infancia, es importante porque debe ser una experiencia, ya que somos generaciones a las cuales no se les garantizó este tema en alto nivel, ya que venimos de modelos de crianza diferentes donde predomina el autoritarismo, donde lo único que se necesitaba era criar seres humanos buenos y el único método eficiente para esto era la obediencia y ya todos sabemos como se obtiene esta, y nuestras generaciones normalizaron estos actos, muchas veces violentos. Lo que traduce que la disciplina y la educación no necesariamente debe corregirse con violencia, como golpes o malos tratos.

Hoy en día cada vez es más fuerte el modelo de crianza con respeto, así nos encontremos con personas que no estén de acuerdo, incluso nuestra propia pareja, pero lo más importante es otorgar la protección de nuestros hijos.

Creado con